Hoy toca una receta muy rica, sorprendentemente rica diría yo, hasta a mí me sorprendió. Pero antes de nada tengo que agradecer a Portomuiños el detalle de mandarme a casa sus algas.
Portomuiños son una empresa familiar coruñesa que comenzó su andadura en el año 1998 rompiendo moldes y apostando entre otros productos por las algas, un producto nuevo y con un potencial muy grande en la gastronomía, especialmente en los últimos años que comienzan a ser usadas con gran éxito en los fogones de los mejores cocineros españoles.
Hace unos 15 días llegaron a casa sus "verduras de mar"en un paquete que contenía tres barquetas, cada una de ellas contenía una especie de alga, a saber: Mastocarpus, Pistilata y Codium. Esta última me sorprendió por que aquí en Alicante toda la vida la he visto por las orillas cuando ha habido oleaje, suelen arrancarse ramificaciones y luego aparecen en las orillas, jamás imaginé que se podía comer....Bueno , es que ni siquiera me lo había planteado. Siento no tener fotos de mas calidad, la cámara que poseo no es precisamente la repera.
Por orden de Izquierda a Derecha: Mastocarpus, Pistilata y Codium |
Me apetecía innovar con alguna tapa, algo de picoteo.... Y me decanté por las gulas por que suelen ser algo insípidas, de ahí que se les "alegre" un poco con el aceite saborizado con el ajo y la guindilla y ya de paso pensé que ese sabor a mar tan intenso de estas algas le iba a venir de maravilla a mis gulas. Dicho y hecho ¡¡Buenísimas!!.
INGREDIENTES:
-1 Paquete de Gulas
-2 Ajos Laminados
-1 Guindilla
-Algas frescas de las variedades Mastocarpus y Pistilata (desaladas)
-Aceite de Oliva
PREPARACIÓN:
-Poner a desalar las algas frescas durante 30 minutos, escurrir y reservar.
-Echar en una sartén un poco de aceite de oliva y cuando esté bien caliente echar los ajos laminados y la gundilla en dos o tres trozos, dorar ligeramente los ajos.
-Añadir las algas en pequeñas ramitas y saltear junto con el ajo y la guindilla apenas unos segundos.
-Añadir las gulas y mezclar bien todos los ingredientes.
-Servir calientes.
Buen provecho.
Seguro que combinadas con las gulas quedan exquisitas las algas.
ResponderEliminarBesos.
que buenas, besos
ResponderEliminarMuy buen plato, nunca he probado las algas pero tienen una pinta muy apetecible
ResponderEliminarYo, que siempre pensaba que se iba al cielo cuando uno moría, me equivocaba y no creía a Sabina en aquella canción que decía que ...el cielo está en el suelo... ¿Te acuerdas de cuál es?, y resulta que el cielo está en tu cocina, Lady, ¡que suerte vivir en tu casa!
ResponderEliminarEres una cocinillas ingeniosa.
Jajaja Eugeni, creo que me valoras demasiado. Supongo que habrás llegado a la conclusión (cómo no... Con lo documentado que estás) que la cocina no es más ni menos que fruto de necesidad de comer y aprovechar los ingredientes que tienes a mano, los que da la tierra (o el mar...)y en eso te aseguro que todos podemos hacer gratos descubrimientos.
ResponderEliminarY sí, recuerdo esa estrofa de Sabina ¡¡Ahí me has dao!! Conozco toda su discografía...¡¡Que digo, me la se al dedillo!! Así que te dedico otra estrofa. Este plato duró, lo que duran dos peces de hielo en un güiski on the rocks....Pos eso.
Besos.
Nena que buena idea para las gulas, que llevas razón, son algo insulsas como no le des el toque picantillo. Así entre el picantillo y el sabor a mar de las algas, el plato debía de estar de vicio.
ResponderEliminarMuy rico.
Besazos